01.06.2016

Sector Privado

La energía es fundamental para las operaciones de todas las organizaciones y puede tener un costo importante, cualquiera sea su rama de actividad. Esto implica que una adecuada gestión de la energía, necesariamente impacta en el balance final de las empresas.

Basta con analizar el uso de la energía a través de toda la cadena de producción y comercialización  de una empresa para darse cuenta de su dimensión.

Como es sabido, además de los costos económicos la energía tiene costos ambientales y sociales, principalmente vinculados al agotamiento de los recursos y a la emisión de gases de efecto invernadero y a un uso inadecuado de los recursos.

Mejorar el desempeño energético de una organización puede proporcionar beneficios rápidos, optimizando la utilización de sus fuentes de energía y activos relacionados con la energía, y reduciendo tanto el costo como el consumo de energía. Asimismo, la organización estará contribuyendo positivamente a promover un modelo de país más sustentable, en armonía con el medio ambiente y su entorno social.

Desde la Dirección Nacional de Energía se han diseñado instrumentos y acciones para promover la eficiencia energética en el sector privado.

Para conocer más sobre las posibilidades de aplicar eficiencia energética en el sector privado acceda a los contenidos relacionados.